<h1> Los alimentos también dan de comer a las emociones </h1>

-  Dietas basadas en productos naturales y , sobre todo, vegetales, son la clave para alcanzar una sensación de paz y tranquilidad.
Volver a los fogones a diario, como antaño, y cocinar con simplicidad es versión segura en calidad.
-  Que tu alimento sea tu medicina , decía Hipócrates ya en el siglo de Pericles.Y cada vez más , parece que tenía razón.
No solo por la repercusión que la alimentación tiene en nuestro estado de salud físico , sino por que en parte este reflejo se ve también en nuestra salud mental.


-  Para ello es importante saber que hay que comer alimentos preparados al momento para que no pierdan su energía y evitar los congelados y precocinados.


-  Ese tiempo que pasamos cocinando, que no tiene por qué ser mucho, es una inversión en salud.
Al final, comemos para generar una buena calidad de sangre que va a regar nuestros órganos y que nos va a dar estrés, enfermedad y desequilibrio(si es ácida) o energía vitalidad y salud (si es ligeramente alcalina) me explico:
Lograr una u otra es muy sencillo y como siempre depende de nuestra dieta y de cómo hagamos las tres comidas principales.


-  Ya sabéis , desayunar como un rico , comer como un pobre y cenar como un mendigo.
La comida es importante y tendrá que ser totalmente equilibrada , por lo que se compondrá de un determinado grupo de alimentos como los carbohidratos, las proteínas o los minerales.


-  En el caso de los carbohidratos no hay que eleguir los refinados (en su procesado se elimina gran parte de la fibra)sino los de energía estable que nos darán concentración y vitalidad , como los cereales integrales en grano.

-  Hay que ingerir proteína para la musculatura y aquí conviene redescubrir la vegetal en forma de legumbres , si bien un poco de pescado nunca nos viene mal.Y, como hoy en día estamos desmineralizados, es interesante tomar verduras del mar (algas).
Esa alimentación , a la que hay que añadir verduras de raíz y redondas , verduras verdes cocinadas ligeramente y semillas, frutos secos, germinados o pickles(verduras fermentadas naturales), es la que nos relajaría y nos haría más felices.


- Al final, el estrés que tanto preocupa se relaciona estrechamente con la alimentación.

Es como una pescadilla que muerte la cola.
Para poder afrontar todas las tareas, cuando reina el cansancio se tiende a ingerir alimentos que dan una energía rápida (chocolates, bollería y , en general, azúcares refinados industriales) al producir una subida inmediata de glucosa que el cuerpo identifica con una gran sensación de energía.Es entonces cuando nos sentimos fuertes de nuevo seguimos trabajando sin concedernos ese descanso que el cuerpo necesita.


-  Pero la energía de estos azúcares y de las bebidas estimulantes  de las que se abusa es falsa y acaba dañando órganos como los riñones y provocando emociones de preocupación , inestabilidad y miedos .Y así el estrés se va agravando.
Además estos azúcares refinados, como las grasas trans , producen cambios en la glucemia que se asocian a la irritabilidad , y los niños son más sensibles a este efecto , sobre todo  si son  hiperactivos.
De hecho , cuando tienen este trastorno la dieta sana es especialmente importante para evitar los síntomas.


-  En definitiva, lo que se necesita para afrontar mejor las tareas diarias es una buena concentración y una mente despejada capaz de resolver rápidamente , y eso lo aportan las verduras y las frutas (por eso los expertos aconsejan en abundancia cuando llegan las temporadas de exámenes).
Así que ahora mismo me voy de paseo saludable.
Qué tengáis buen día.